De D. para D.

5 de diciembre, 2020

Querida D.,

Tal vez en mis últimas palabras encuentres dolor o nostalgia. No soy bueno para despedirme, siendo sincero, me gustan los encuentros, odio las despedidas…

Es extraño, en mi primera carta comencé hablando de las despedidas, esas heridas internas que te acompañan después de un adiós.

3 meses después de la carta número 1.

Ha pasado un tiempo considerable y retorno al mismo punto, sin embargo, no soy el mismo. He viajado en múltiples ocasiones a mi pasado para conectar con la memoria, para descubrir en mi historia familiar las cosas que no se dicen, las cosas que callamos y preferimos mantener ocultas, mentiras disfrazadas de secretos.

Esta semana conocí a mi tío Isidoro, un hombre asesinado el 5 de marzo de 1973.

Pero no, no me gustaría que lo conocieras a través de mis palabras, prefiero presentártelo como yo lo conocí, con las palabras exactas:

En el rancho San Isidro, estado de Michoacán
mataron a un gallo fino en su caballo alazán.
El día 5 de marzo, año del 73
murió Isidoro Hurtado, lo mataron entre 3.
Ya lo estaban esperando, antes del amanecer
lo mataron a balazos por culpa de una mujer.
Su pobre madre lloraba, muy triste sin compasión
ya mataron a Isidoro, lo mataron a traición.
La gente de San Isidro, todos lo fueron a ver
la querida que él tenía, de miedo se echó a correr.
Ya con esta me despedido, ya terminé de cantar
en el velorio decían: lo mató Don Baltazar.

Así es, lo conocí a partir de un corrido que me encontré en el lado B de un disco de acetato que guarda mi padre en la vieja consola.

No te voy a mentir, él todavía llora cuando escucha el corrido, seguramente conecta con el pasado, con esos momentos difíciles de su infancia, con las heridas que aún supuran en alguna parte de su frágil espíritu.

Y yo, también lloro con las despedidas. Cuando mi mano derecha se levanta para decir adiós, me embarga la nostalgia y prefiero sonreír, prefiero pensar en el siguiente encuentro, prefiero seguir escribiendo palabras aisladas, tal vez en algún momento sean tantas que logre escribir 1 carta más…

Hasta pronto.

Con cariño…

D.